Nació en Bucalemu en el 1840, en una familia de alta raigambre aristocrática. Estudió en el Instituto Nacional, de donde egresó con el título de abogado.

Desde joven adscribió la doctrina liberal y militó en el Club de la Reforma. Ejerció funciones en la Cámara de Diputados, pero su figuración política comenzó durante el gobierno de Domingo Santa María, quién lo nombró sucesivamente ministro de Relaciones Exteriores, de Defensa y del Interior. Pronto se convirtió en el sucesor oficial del presidente Santa María, presentándose en 1886 como candidato único a la presidencia de la República. El 18 de septiembre de 1886, asume la presidencia de Chile encabezando la Coalición Liberal. Durante ese período, fines del siglo XIX, lo altos ingresos del salitre hacían de Chile un país rico. Balmaceda supo aprovechar esas circunstancias para llevar a cabo un gran plan de obras públicas y una reforma y mejoramiento de la educación pública.

Balmaceda inició la construcción de la línea férrea desde Santiago a Melipilla el año 1988, lo cual se paralizó por los sucesos de la Revolución de 1891. La crisis política estalló en 1891. La ruptura se desató ante la negativa por parte del Congreso de aprobar la Ley de presupuesto de ese año. Balmaceda aprueba de facto la ley del año anterior y se declara como única autoridad. El 7 de enero de 1891, la Escuadra, apoyada por las fuerzas congresistas, se sublevó, dando comienzo a la guerra civil. El Presidente Balmaceda, luego de conocerse el fracaso de las fuerzas gobiernistas en la batalla de Placilla, a las dos de la madrugada, abandonó caminando el Palacio de la Moneda para refugiarse. El día 19 de septiembre de 1891, el presidente Balmaceda se suicidó, disparándose un tiro en la sien.

Se trasladó el cuerpo al cementerio en secreto durante la noche. El 26 de noviembre de 1896, fue trasladado el cuerpo de Balmaceda al mausoleo de su familia en el Cementerio General.

 

Fuente:

Diario El Proa